Fecha de la intervención: 10/10/2017 Fecha de la filmación: 28/11/2018
Dani tiene 17 años, es de Madrid y nos cuenta que al jugar a tenis sentía un dolor de cabeza al realizar el servicio (entrena tres horas y media diarias). Al principio pensó que provenía del dolor en las cervicales y de la sobrecarga, pero tras ir mucho tiempo al fisioterapeuta decidió hacerse una resonancia magnética y entonces fue cuando descubrió que tenía el Síndrome de Arnold Chiari. Entonces, su padre empezó a investigar sobre ello en Internet y se puso en contacto con el Institut Chiari de Barcelona. Le explicaron en qué consistía la sección del Filum Terminale; que era muy poco invasiva y que era segura, así que decidió operarse. El día que filmó su vídeo testimonio fue el día del control al año de la intervención, y comentó que estaba muy satisfecho con los resultados: pudo seguir jugando al tenis sin tener ningún síntoma y fue una salvación para él que le permitió luchar por su sueño. Dani anima a todos los que estén sufriendo como él a someterse a esta operación, porque es una inversión que les salvará la vida.