Consultenos

Juan Cabaco. Escoliosis y tres hernias discales lumbares

Publicado por el 20 junio, 2006


juan_cabaco
Fecha de intervención: junio 2006

Tengo 23 años y soy hijo de Florentina Blanco (otro caso de escoliosis operada del filum terminale por Dr. Royo), vivo a las afueras de Barcelona (Cornellá) y ahora mismo soy una nueva persona, no tengo ningun dolor, la sobrecarga en los riñones desapareció, mis hormigueos y mis temblores en las manos ya son historia igual que el dolor incasanble que tenia en las rodillas. Ahora mismo continuo con mi vida como era antes de que tuviera la enfermedad, que solo ha sido un pequeño obstaculo en ella, nada más.

Todo esto empezo a pasarme en las navidades pasadas, pasaban los dias y notaba una sobrecarga en la zona lumbar, como soy joven no le daba gran importancia a lo que me estaba pasando, ya que tengo un trabajo movido y pense que fue a causa de un mal gesto, fui al servicio médico de mi trabajo y me dijeron que era una lumbalgia y el bultito que me había aparecido me dijeron que era un quiste sin importancia, como lo normal me dieron “reflex” y a seguir trabajando. Pasaron dos semanas y yo seguia con la sobrecarga muscular y con un horrible dolor en la zona lumbar, estaba trabajando y note un pinzamiento que me dejó clavado, sin movimiento, sin fuerzas para ponerme en pie, nada, empecé a notar un dolor muy agudo que me dejaba sin respiración, y me llevaron al servicio médico del trabajo y me hincharon a pastillas porque como no saben diagnosticar “NADA” pues lo más sencillo que hay es atiborrar a una persona a medicamentos.

Pasaron unos dias, yo cogí la baja en el trabajo porque no podia con mi alma, entonces le comenté a mi madre que llevara a su médico el Dr. Miguel B. Royo Salvador, (que a ella tambien le devolvió la vida hace unos años), para que me supiera decirme lo que me pasaba y escuchar otra opinión ya que había pasado por otros médicos y me decían más de lo mismo una lumbalgia. Cuando el doctor me reconoció y dijo que no era sólo una lumbalgia, sino que tenía tres hernias discales situadas entre las vertebras L4-5 y L5-S1, y un poquito de escoliosis, como mi madre, debido al síndrome del filum terminale (una forma oculta de médula anclada), un signo Babinski bilateral que indicaba una afectación de la médula espinal. En ese momento note un escalofrio por todo el cuerpo, se me hechó el mundo encima y al ver la mala cara que se me quedó, el doctor Royo me dijo que no me preocupara, que lo que tenia era solo un pequeño problema que él iba a solucionar, me dijo que esperara 6 meses porque al ser joven con natación se me podria corregir algo la espalda, queria esperar y ver mi caso, porque lo que tenía empezaban a ser los primeros síntomas.

Pasaron esos 6 meses, fueron muy duros tanto fisica como mentalmente. Desde el primer pinzamiento mi vida dió un giro descomunal, mis sintomas eran los que he descrito antes y de tener 23 años pase a ser como una persona de 80, con dolores, temblores, siempre encurvado, caminaba dos pasos y parecía que llevara horas caminando, muchas de mis actividades diarias se convertían en una empinada cuesta y por fin llegó aquel esperado día 13 de junio del 2006, cuándo me dijo que con la cirugía se me solucionaria todo, yo le dije que me quedaba en sus manos estaba tan desesperado que a todo decía que si, y asi fué a la semana me operó.

Martes 20 de junio del 2006, ese fué uno de mis mejores dias y que recordaré siempre, porque por fin iba a deshacerme de mi problema. Eran las 8 de la mañana cuando entre en el quirofáno con nerviosismo y allí estaba el dr. Royo, preparando y coordinando para que todo fuese perfecto y asi fué. La intervención consistió en aprovechar una pequeña obertura al final de la zona lumbar y desde alli cortar el filum terminale, para que quede liberado y asi ceder la tensión que producia desde el cráneo a la medula espinal. La otra parte de la intervención fue en extraer las tres hernias discales de las vertebras L 5-S1 bilateral y L 4-5 izquierda , que oprimian los nervios y al fin dejarlos liberados.

Despues de la operación, estando en la cama de la clínica note muchos cambios el primero de ellos fue que me levante y me vi más alto, como siempre andaba encorvado parecía hasta más bajito, pude caminar sin miedo, desapareció aquel molesto dolor de las rodillas, aquella sobrecarga en la zona lumbar, el temblor de las manos y el hormigueo desapareció. En tan solo unas horas de la intervención, mi vida dió un giro radical. Ahora pasados tan solo dos meses de la operación soy el mismo chico de antes de que tuviera la enfermedad, puedo volver a mis antiguas actividades sin miedo a que me duela nada y me siento mucho más activo y con muy buen humor, que antiguamente carecía de él por el malestar, que me duraba desde que salía hasta que se escondia el sol.

Con este escrito, quiero apoyar a todas las familias que estan padeciendo de estas enfermedades como las sufri yo y mi madre y decirles que si hay remedio, porque muchos de ustedes no tienen la información necesaria. Dejen de sufrir y dejen que les ayuden, como hicieron conmigo. El Dr.Miguel B. Royo Salvador a devuelto la felicidad en mi y a mi familia, es y sera un buen amigo de la familia. Muchas gracias.

Si me necesitan, o si quieren preguntarme cualquier cosa de la enfermedad y como lo he superado, no duden en preguntarlo, aqui dejo mis señas:

E-mail: [email protected]


Horario de atención

en el ICSEB y por teléfono

Lunes a Jueves: 9-18h (UTC +1)

Viernes: 9-15h (UTC +1)

Sábado y domingo: cerrado

[email protected]

Atención las 24 horas

en el formulario de nuestra Web

932 800 836

932 066 406

Asesoría Legal

Normativa jurídica

Aviso legal

Dirección

Pº Manuel Girona, nº 32

Barcelona, España, CP 08034