Virginia. Escoliosis idiopática, Síndrome de Tracción medular; Síndrome de Arnold Chiari I

Publicado por ICSEB el 15 septiembre, 2011

Fecha de intervención: junio 2010

Me llamo Virginia, tengo 37 años y soy natural de Bilbao. scoliosisxpongo mis circunstancias, en primer lugar para agradecer al Dr. Royo y Dr. Fiallos, así como al resto del equipo, la buena atención, sencillez y efectividad en las consultas y operación quirúrgica filum terminale que me fue practicada el 8/6/2010 y que han aliviado los síntomas que padecía.

Al margen de que mi desarrollo desde la infancia ha sido complejo por retraso psicomotor, déficit de lenguaje, y otros, en Julio de 2004 (30 años) acudí al Neurólogo porque me caía de rodillas con cierta frecuencia fallándome más un lado que otro, sin poder dar explicación ya que sufría caídas sin contorsión, ni tropiezo. En la Resonancia Magnética de 8 de julio de 2004 fui diagnosticada de MALFORMACIÓN DE CHIARI I pero no recibí ninguna explicación de dicha dolencia ni de su evolución en el futuro.

El tiempo transcurría y cada vez aparecían síntomas diferentes, como cansancio generalizado, náuseas matinales, vómitos, estreñimiento, apatía, tics, dolor en el costado izquierdo… Durante años no se ha podido justificar su causa u origen, que coincidiendo con la regla me dejaban postrada en la cama sin que me pudiera mover, ni siquiera cambiar de postura. Incluso mi ginecóloga me alertó de que podía tratarse de menopausia precoz, consecuencia de la malformación neurológica. Ante esta situación cada vez más dolorosa y persistente, en consultas médicas se me indicó tratamiento para vómitos, fibromialgia o fatiga crónica, antiinflamatorios, antidepresivos y ansiolíticos.

El primer neurocirujano al que acudí no optaba por operación ni solución alguna. El neurólogo me recomendaba que siguiera las indicaciones y medicación del internista, y que volviera en el plazo de un año. Pero mi situación era insoportable por los episodios dolorosos y demás síntomas que me iban recluyendo y afectaban a diversas áreas de mi vida.

A través de internet, un familiar localizó el Instituto Chiari y ni yo, ni mi familia, dudamos en consultarles mi caso. El diagnóstico fue claro, y mi situación me abocaba a buscar una solución que en la medicina tradicional no se me brindaba y que sólo me ofrecía píldoras y píldoras, sin evaluar mi calidad de vida.

El 8 de junio de 2010 fui operada en la Clínica Cyma y mi mejoría ha sido, y es en la actualidad, evidente. No tomo medicación, simplemente algún Ibuprofeno con las molestias premenstruales. Sé que la malformación está ahí, pero el alivio ha sido concluyente: han cesado las náuseas, el dolor intercostal izquierdo y la mayoría de los tics; también ha disminuido el desasosiego que era perenne conmigo. Veo el futuro con esperanza y tal vez haya retrasado la degeneración que conlleva la propia enfermedad.

Muchas gracias Dr. Royo y remito este testimonio por si buenamente mi experiencia pueda servir a otros/as
que estén en la situación que he narrado y que hoy es cosa del pasado.

Atentamente,

Su paciente Virginia